Por: Arq. Miguel Romero – Director de la Carrera de Arquitectura, Urbanismo y Territorio de la USIL.
El crecimiento de nuestras ciudades se ha dado desde hace sesenta años por la invasión, que es la peor forma de crecer, pues esta decadente ciudad es hecha por los propios ciudadanos sin conocimiento técnico de la estabilidad, funcionalidad y estética de las edificaciones y de las habilitaciones urbanas que, en su conjunto, constituyen las ciudades.
Desde el año 2001 se viene construyendo una nueva visión de urbanismo y arquitectura desde el Estado, donde la participación conjunta de este con el sector privado va dando resultados benéficos a las ciudades. Por un lado, el Estado promueve, norma, supervisa y facilita los permisos de las licencias y, por otro lado, el sector privado cumple el rol de invertir, diseñar, construir y vender los proyectos y obras, en suma; incrementar la participación de los profesionales de la ingeniería, arquitectura y urbanistas en la constitución de nuestras ciudades y, de esta manera, combatir la informalidad que ha alcanzado cifras mayúsculas.
El Ministerio de Vivienda,Construcción y Saneamiento señala que existe un orden de 7,560 barrios urbanos marginales a nivel nacional; es decir, tenemos un orden de 9 millones de compatriotas viviendo en áreas urbanas, producto de la invasión con baja calidad de vida, por no contar con servicios básicos, equipamientos básicos de educación, salud, recreación, entre otros. Por ello, a los técnicos nos corresponde participar en la formulación de nuevas normas técnicas que generen inversión cultural, social y económica.
GENERACIÓN DE SUELO URBANO Y NUESTRAS CIUDADES
Uno de los más grandes problemas que afronta la ciudad de Lima, en lo que se refiere a la construcción de nuevas viviendas, es la falta de suelo urbano, para ello en el año 2012 se creó un conjunto de cinco programas que permitían implementar el marco normativo que generaría el desarrollo urbano nacional, justamente dos programas específicos: Generación de Suelo Urbanoy Nuestras Ciudades.
Mediante el D.S.N.º003-2012-Vivienda, se creó el Programa Generación de Suelo Urbano, cuyo propósito principal es atender la demanda de suelo urbano con fines de vivienda social y servicios complementarios de infraestructura y de equipamiento, mediante la promoción de acciones de recuperación y/o transformación urbana y desarrollo de proyectos de producción de nuevo suelo urbano. Sus objetivos son urbanizar terrenos de propiedad del Estado con aptitud urbana para el desarrollo de proyectos de vivienda social y sus servicios complementarios; recuperar espacios y predios deteriorados y/o subutilizados que sean utilizables para el desarrollo de proyectos de vivienda social; promover el desarrollo de inversiones encaminadas a dar un mayor y mejor uso del suelo mediante la modalidad de asociación pública privada u otras permitidas por la legislación vigente, así como por mecanismos de facilitación urbana, para el desarrollo de proyectos de vivienda social.
Asimismo, mediante el D.S.N.º 005-2012-Vivienda, se crea el Programa Nuestras Ciudades, con el propósito de lograr el desarrollo sustentable de las ciudades del Perú a través de la participación coordinada y concurrente de los tres niveles de Gobierno, la población, el sector privado y la sociedad civil. Tiene como objetivo promover el crecimiento, conservación, mejoramiento, protección e integración de nuestras ciudades de manera que contribuyan a mejorar la calidad de vida. Busca activar en ellas potencialidades naturales culturales, atraer nuevas inversiones e irradiar beneficios a sus áreas de influencia. El programa incluye la promoción del reasentamiento de ciudades existentes y/o fundación de nuevas ciudades, el desarrollo de capacidades locales y la promoción ciudadana.
COMBATE A LA POBREZA URBANA Y RURAL
En este tiempo transcurrido, el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento ha desarrollado una labor fundamental de crear nuevos programas para combatir la pobreza urbana y la rural.
Por ejemplo, en lo que se refiere a pobreza urbana se han creado dos nuevos programas, uno al que se le ha denominado Nuestras Ciudades y el otro Generación de Suelo Urbano; y para combatir la pobreza rural, se han creado igualmente dos nuevos programas, el primero Apoyo al Hábitat Rural y el otro Saneamiento Rural. Tal como explicamos, ambos programas tienen como objetivo fundamental reducir la pobreza urbana y rural que experimenta por años nuestro país.
Lo singular de esta situación es que por primera vez se encara no solo el tema de la pobreza urbana, sino además el de la pobreza rural, en la que ambas tienen dos singularidades: en la pobreza urbana se concentran más o menos 7,560 asentamientos urbanos populares que reúnen en promedio a unos 9 millones de habitantes que no tienen agua, desagüe, luz, equipamiento de vías adecuadas, es decir, estructuras urbanas producto de la invasión.
CIUDADES FORMALES
El Programa Nuestras Ciudades trata de integrar la ciudad dividida entre lo formal (30%) y lo informal (70%) y lo que quieren es integrarlas a través de vías, servicios de agua, desagüe, luz, parques. Dicho modelo de aplicación se verá en la ciudad de Pisco, la que ha sido “tomada” no solo para hacer viviendas, sino para ser de ella una ciudad modelo.
La ciudad de Pisco era un archipiélago de pobreza y de riqueza. Pobreza con poblaciones como Túpac Amaru, San Clemente, el mismo Pisco y San Andrés; así como Paracas que es una riqueza pasmada en el tiempo; entonces, cuando vemos que hay este archipiélago de pequeñas ciudades la debemos integrar en una sola mediante un instrumento técnico que permita mejorar esta situación anómala. Para ello se desarrolló el Modelo de Desarrollo Territorial de la Provincia de Pisco, que integra todas las potencialidades como la posición geopolítica, tanto a nivel nacional como internacional de primer orden por los ejes IIRSA como puntos de relación con el Atlántico y el PacÍfico, y en el caso de la integración interna porque la vía de Los Libertadores la integran también Ayacucho, Huancavelica y Cusco, es decir, une la costa con los andes. La provincia de Pisco cuenta con el aeropuerto, el puerto y la carretera que la une a Lima, formando una intermodalidad terrestre-aéreo-marítimo muy importante para el futuro de la región.
Para concluir, comentamos que un Estado moderno debe de ser eficiente y cumplir un nuevo rol, fundamentalmente el de promover y facilitar la inversión para combatir la invasión, mal endémico de nuestra ciudades peruanas. Por ello, es fundamental el conjunto de medidas y normas técnicas que se vienen implementando y que corresponden a una política de Estado en el sector vivienda y construcción, que permite ir cambiando progresivamente el crecimiento por invasión al crecimiento por inversión.
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