El avance del coronavirus ya ha llegado a más de 160 países y la cifra de infectados supera los 250,000 en todo el planeta. Las medidas adoptadas en la mayoría de países obligan a los ciudadanos a permanecer en casa, lo que conlleva a la búsqueda de soluciones para diversas actividades económicas.
Firmas de análisis y reconocimiento de mercados de todo el mundo están reportando continuamente el impacto del COVID-19. Una de ellas es Janus Henderson, grupo global de gestión de activo, que detalla cuáles son los sectores más favorecidos y perjudicados por la pandemia.
Según un estudio de la empresa con sede en Londres, el mercado asiático es uno de los que ha sufrido un mayor impacto, especialmente el sector vivienda. Hasta el mes de febrero, el mercado de compraventa de casas cayó en las 36 principales ciudades de China, y las principales agencias inmobiliarias han tenido que cerrar sus puertas para frenar la pandemia. No obstante, la situación ha generado mejores oportunidades para otros modelos de negocios.
En paralelo con el incremento de precios más moderado de los últimos dos años, la venta de propiedades por internet registró una evolución importante. Según recoge South China Morning Post, se produjeron 47,000 operaciones por un valor de € 7,660 millones.
Según Janus Henderson, la mayor actividad de teletrabajo y la creciente demanda virtual ha favorecido especialmente a las comunidades de viviendas prefabricadas, así como a la logística y activos alternativos, como los centros de datos y las torres de telefonía.
La mencionada firma detalla que estos sectores se han visto beneficiados por “factores favorables estructurales”, ya que incorporaron tendencias disruptivas, a las que contribuyen los cambios demográficos y el avance de la tecnología.
La presencia del coronavirus ha dado lugar a que las empresas que operan en el continente asiático implementen planes laborales a distancia. Esta modalidad destaca por ser flexible y rentable, y podría hacer que muchas empresas se replanteen el modelo de trabajo presencial.
Es así que una pandemia de alcance mundial ha tenido como consecuencia la apertura de nuevas oportunidades en el mercado inmobiliario, al impulsar nuevos estilos de vida y avances tecnológicos, que de a pocos está modificando la demanda y uso de espacios.
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