Ikea, la cadena sueca de muebles y decoración dejará de distribuir su catálogo impreso tras siete décadas «exitosas». Toca «pasar página», indicó la propia empresa en un comunicado. Es una decisión «emocional pero racional», ya que hay menos lectores que en años anteriores y los hábitos han cambiado. El último catálogo será el de este año, que cuenta con 40 millones de copias.
La firma informó en su comunicado que el catálogo ha sido uno de los productos «más únicos e icónicos» que ha contribuido su éxito a nivel global. Ha «inspirado a miles de millones de personas alrededor del mundo». Pero el consumo de medios y el comportamiento del cliente han cambiado, «e Ikea ya está incrementando la inversión digital mientras los volúmenes e interés en el catálogo han bajado».
«Ikea seguirá inspirando y ayudando a la gente en sus necesidades y sueños con nuevos y apasionantes herramientas», tanto en canales como en formatos. En ese sentido, la decisión de decir adiós al catálogo va de la mano con la transformación de Ikea en más digital y accesible. «En los últimos años hemos transformado varios aspectos de cómo llegar al cliente y como interactuar con ellos, para llegar a donde estén» resume Konrad Grüss, al frente de Inter Ikea, holding de Ikea.
En el último año, las ventas online crecieron el 45%, con 4,000 millones de visitas. Junto al empuje del comercio electrónico la empresa ha crecido en economía circular, con sus primeras tiendas de segunda mano o con la compra de muebles usados.
Para despedirse, Ikea lanzará en el otoño del 2021 un libro-homenaje con ideas de decoración que pondrá punto y final al catálogo. El primer catálogo se publicó en el 1951, con 285,000 copias distribuidas en el sur de Suecia, en sueco y de 68 páginas. En 1998 llegó la primera edición de muebles de oficina, dos años después se lanzó el primer catálogo simultáneamente en online y en el 2001 se empezó a vender a través de internet. En 2016, distribuyeron 200 millones de copias, en 32 lenguas y más de 50 mercados.
