El director ejecutivo de Proinversión, José Salardi, y el gobernador regional de Áncash, Koki Noriega, firmaron el convenio interinstitucional a través del cual el Gobierno Regional de Áncash encargará a Proinversión la selección de empresas internacionales, técnicamente solventes, para la elaboración de estudios de preinversión y la supervisión, de dichos estudios del proyecto de irrigación Chinecas.
El convenio establece que en caso el proyecto resulte con aptitud para su ejecución a través de un esquema de Asociación Público – Privada (APP), la conducción de las fases de estructuración y transacción hasta la adjudicación del referido proyecto estará a cargo de Proinversión.
Esta suscripción del convenio se dio en la Bocatoma La Huaca del proyecto Chinecas, en la provincia del Santa, en el marco de la visita técnica que realizó el titular de Proinversión, José Salardi, y directores de la entidad, a potenciales proyectos de inversión público-privada en los departamentos de La Libertad y Áncash.
Todas las intervenciones de Proinversión se realizarán en coordinación con el Gobierno Regional de Áncash y el Proyecto Especial Chinecas, quienes durante la etapa de estudios se constituirán en Unidad Formuladora del Proyecto. El convenio, además, regula el compromiso del Gobierno Regional y el Proyecto Chinecas de sanear y tener disponibles y bajo su custodia los terrenos para las obras y las tierras que se planea incorporar, garantizando su oportuna disponibilidad libres de ocupantes y cargas que impidan que sean destinados a los fines del proyecto.
El Proyecto Especial Chinecas tiene como finalidad derivar las aguas del río Santa para irrigar las tierras agrícolas en los valles e intervalles del Santa, Lacramarca, Nepeña, Casma y Sechín en el departamento de Áncash, además del suministro de recursos hídricos para uso poblacional en las localidades de su ámbito.
El proyecto cuenta con una primera etapa de obras existentes, las cuales comprenden bocatomas en el río Santa, canales y túneles con extensión hasta el valle de Nepeña. En sus etapas subsiguientes, el proyecto prevé la construcción de una nueva bocatoma y embalses para la regulación de las aguas del río Santa, además de la extensión de su canal principal a los valles de Casma y Sechín.