El sector de la construcción en España enfrenta un déficit de mano de obra que se ha intensificado desde 2023, especialmente en la edificación residencial. Según el informe del Observatorio Inmobiliario de BBVA Research, correspondiente a junio de 2025, esta carencia se ha convertido en la principal barrera para el desarrollo de proyectos, superando incluso a factores como la falta de materiales o las restricciones financieras, que actualmente no representan un obstáculo relevante para el sector.
Uno de los factores más alarmantes es el envejecimiento de la fuerza laboral. Más del 55% de los trabajadores en construcción tienen más de 45 años, cifra superior al promedio del resto de sectores económicos. Esta tendencia no solo compromete la productividad del sector, sino también su capacidad de renovación generacional, especialmente en ocupaciones clave como albañiles, fontaneros y electricistas.
Pese a este panorama, se empieza a observar un leve punto de inflexión gracias al aumento del empleo de inmigrantes. Entre 2022 y 2024 ha crecido el número de trabajadores extranjeros de entre 30 y 44 años, sobre todo en los oficios más demandados. Aunque la mayor parte se concentra en puestos de menor cualificación, también se registra un incremento en roles técnicos, lo que sugiere una oportunidad para rejuvenecer y diversificar la fuerza laboral.
El déficit estructural de trabajadores también refleja una baja cualificación. El nivel educativo de los empleados de la construcción en España es notablemente inferior al de otros países europeos. La proporción de trabajadores con estudios superiores es muy baja, lo que podría estar incidiendo negativamente en la productividad y en la capacidad de adaptación tecnológica del sector.
El crecimiento sostenido de vacantes sin cubrir —que se ha cuadruplicado entre 2016 y 2024— es otro síntoma de un mercado laboral desajustado. En marzo de 2025, los ocupados en la construcción representaron apenas el 6,8 % del total nacional, muy por debajo del promedio histórico del 8.9 %. Esta brecha evidencia una lenta recuperación tras la crisis del sector y revela la urgencia de medidas estructurales.
El informe citado fue elaborado por el Observatorio Inmobiliario de BBVA Research, entidad que analiza de forma periódica los principales indicadores del sector construcción en España. A través de datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Eurostat (oficina estadística de la Unión Europea) y otras fuentes oficiales, el documento ofrece una radiografía precisa sobre los factores que limitan actualmente el dinamismo del sector, con énfasis en el mercado laboral. Este análisis forma parte del esfuerzo del banco por generar conocimiento económico que contribuya al diseño de políticas públicas y decisiones empresariales más informadas.
En esa línea, el estudio de BBVA Research resalta que la escasez de mano de obra no es un fenómeno aislado ni exclusivo de España, sino una tendencia que se repite en varios países europeos. Sin embargo, el caso español se ve agravado por la falta de personal cualificado y la baja proporción de jóvenes en el sector. Por ello, el informe insiste en que, más allá de medidas coyunturales, se requiere una estrategia integral que combine formación profesional, atracción de talento y modernización del mercado laboral de la construcción.