Las arquitectas Yvonne Farrell y Shelley McNamara, fundadoras del estudio Grafton Architects, obtuvieron el prestigioso Premio Pritzker, considerado el “Premio Nobel de Arquitectura”. El jurado otorgó al dúo de irlandesas este importante reconocimiento en virtud de sus obras, marcadas por la integridad, complejidad y respeto por las comunidades.
Farrell y McNamara se conocieron hace más de 40 años en la Escuela de Arquitectura del University College Dublin. A lo largo de su trayectoria, se han caracterizado por su estilo proporcionado, que sin embargo no pierde relación con la escala humana.
“Yvonne y Shelley han demostrado saber crear espacios respetuosos y novedosos, honrando la historia al mismo tiempo que demostraron un dominio del entorno urbano y el oficio de la construcción”, señala la organización del evento en su sitio oficial.
Y agrega: “Saben equilibrar la fuerza y delicadeza, y defender una reverencia de los contextos específicos del sitio. Sus instituciones académicas, cívicas y culturales, así como los desarrollos de viviendas, dan como resultado obras modernas e impactantes que nunca se repiten o imitan, pero son decididamente de su propia voz arquitectónica”.
A su vez, el jurado destacó la integridad de las obras de Farrell y McNamara, entre otras virtudes como la forma en que realizan su práctica, su creencia en la colaboración, y su generosidad hacia sus colegas. Asimismo, resaltó su participación como curadoras en la Bienal de Venecia 2018, donde mostraron “un compromiso incesante con la excelencia en la arquitectura”.
OBRAS
Bajo la firma de Grafton Architects, las flamantes ganadoras del premio Pritzker cuentan con un amplio portafolio de proyectos. Desde 1978, han liderado obras culturales y académicas como el Urban Institute of Ireland, University College Dublin, Solstice Arts Centre, Loreto Community School y la Medical School, University of Limerick.
Fuera de Irlanda, su trayectoria incluye grandes obras como la Universita Luigi Bocconi (Milán, Italia), que recibió el premio World Building of the Year en el World Architectural Festival 2008 de Barcelona.
Uno de sus proyectos más destacados se encuentra en el Perú. Se trata del Campus Universitario UTEC, en Barranco, un amplio complejo de concreto que destaca por sus terrazas escalonadas y pasarelas voladoras, que dan forma a una red de espacios al aire libre que facilita el encuentro entre los alumnos. Este proyecto recibió múltiples reconocimientos, entre ellos el de “mejor edificio del mundo” por parte de la Royal Institute of British Architects (RIBA).
Discusión sobre la noticia