La Federación de Trabajadores en Construcción Civil del Perú (FTCCP), que afilia a más de 190 sindicatos del sector construcción en todo el país, celebró 62 años de fundación y lucha consecuente por derechos laborales y un Perú democrático y con justicia social.
La ceremonia, realizada el 17 de diciembre en su local de La Victoria, en Lima, estuvo presidida por el secretario general de la FTCCP, Luis Villanueva Carbajal, y contó con la presencia del secretario de Defensa Laboral de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), Vidal Espinoza; el viceministro de Construcción y Saneamiento, Julio Kosaka Harima; la viceministra de Promoción del Empleo y Capacitación Laboral, Jeanette Moborikawa Nonogawa; el presidente de CAPECO, Humberto Martínez Díaz, y el alcalde de la Municipalidad de La Victoria, Luis Alberto Gutiérrez.
La FTCCP, fundada el 19 de diciembre de 1958, es la única organización sindical del Perú con negociación colectiva por rama de actividad, herramienta legal que le permite solucionar en trato directo con la representación empresarial (CAPECO) el Pliego Nacional de Reclamos en Construcción Civil, brindando aumentos salariales y otros beneficios a todos los obreros en construcción civil del país. Por ello, en los últimos 17 años, la remuneración de los obreros se ha incrementado en promedio en 119%, un 37% por encima de la inflación.
A escala nacional, la FTCCP está afiliada a la CGTP; a nivel regional, a la Federación Latinoamericana de la Edificación, Madera y Materiales de la Construcción (FLEMACON), y a escala mundial, a la Unión Internacional de los Sindicatos de la Construcción y la Madera (UITBB).
Luis Villanueva Carbajal recordó que entre las demandas de los trabajadores en construcción civil se encuentra la reforma del sistema de pensiones, pues las AFP no aseguran una pensión mínima y menos del 10% de los obreros del sector logran pensiones en el sistema nacional, debido a la característica de la eventualidad de su trabajo (dura mientras dure la obra para la que fueron contratados) y la alta informalidad, que en el sector construcción supera el 80%.
Asimismo, recalcó la demanda constante al Gobierno de lucha frontal contra las mafias que utilizan seudosindicatos de fachada para sus delitos y generan violencia en el sector construcción.