Amalia Moreno es una abogada especializada en contrataciones públicas y derecho administrativo, con amplia experiencia en el Estado. Trabajó varios años en el Organismo Superior de Contrataciones del Estado – OSCE y en el Ministerio de Economía, antes de aceptar el reto de trabajar en el programa de obras de infraestructura y edificaciones para los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Lima 2019, al lado de Carlos Neuhaus. La experiencia recogida en este ambicioso y exitoso proyecto, le permitió asumir la Dirección Ejecutiva de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios- ARCC, cargo en el cual pudo mejorar sensiblemente los niveles de inversión. En mayo pasado, el gobierno del Presidente de la República, Pedro Castillo decidió –de manera abrupta y descortés– dejar sin efecto su designación.
La doctora Moreno aceptó muy gentilmente recibir a IEC CAPECO para compartir sus opiniones sobre la contratación de obras públicas y la gestión de infraestructuras, luego de su paso exitoso por la ARCC. Sus reflexiones son muy ilustrativas sobre los retos que debe superar nuestro país para resolver los déficits de infraestructura e imponer la meritocracia y la honestidad en la contratación pública. La gran mayoría de sus planteamientos son coincidentes con los que se han venido difundiendo a través del IEC. En unos pocos casos, como el referido a las razones que explican la baja calidad de los expedientes de obra, CAPECO tiene discrepancias con su punto de vista. Pese a estas puntuales diferencias, es necesario reconocer la capacidad, la experiencia y la voluntad que ha evidenciado la doctora Moreno en el ejercicio de importantes responsabilidades públicas y que, con seguridad, seguirá asumiendo en el futuro (GVR).
¿Qué necesita Piura y cómo la visualiza en algunos años? ¿Cómo engranar el trabajo que ha hecho la Reconstrucción con esos objetivos a futuro?
En cuanto a la Reconstrucción, la inversión destinada a Piura fue de 7,000 millones de soles para una meta 2,400 intervenciones en la región. De esa cifra, hasta el primer trimestre del 2022, se han ejecutado 900 y hay un promedio de 800 intervenciones en marcha. Hay otro porcentaje que, por falta de financiamiento, todavía no se habían iniciado, pero en líneas generales, la brecha que encontramos se ha ido cerrando.
Dentro de esa ejecución ¿Cuáles son los hitos más importantes?
Dentro de estos 7,000 millones hay dos bloques: la Reconstrucción propiamente dicha y las obras de prevención. Estas últimas corresponden a proyectos nuevos, es decir, nunca existieron, pero se tienen que trabajar para que cuando venga el siguiente Fenómeno del Niño no nos tome desprevenidos. En este paquete hay obras importantes como el tratamiento del río Piura, el drenaje de la ciudad de Piura, y de otras de ciudades como Sullana, Talara, Paita. Y, cuando nos referimos al tratamiento de un río, inmediatamente vienen dos conceptos: Defensas ribereñas y descolmatación.
El trabajo de descolmatación de ríos también es tarea de otras áreas del Ejecutivo y no son necesariamente relacionadas a la reconstrucción…
Debo decir que este trabajo no es un mérito nuestro. Cuando ingresamos, desde el Ministerio de Agricultura ya se había gestado un proyecto integral, que comprende trabajos en distintos ámbitos del río propiamente. Pero, primero había que analizar ¿por qué se generan estas inundaciones? puede ser, por ejemplo, que las aguas transitan con mucho sedimento. Y ¿por qué viene mucho sedimento? porque no hemos trabajado la parte alta y ¿Qué cosas no hemos trabajado en la parte alta? la reforestación. Entonces dentro de esta solución integral hay una inversión importante en infraestructura verde, que de todas maneras se tiene que generar para que podamos estar medianamente protegidos. Entonces, la primera novedad es la reforestación de la parte alta, pero conjuntamente con ella, hemos incluido la construcción de pequeños reservorios a lo largo de la cuenca. Ahí hubo todo un debate, porque la función de la Reconstrucción es evitar la inundación, no ha sido, por ejemplo, cerrar brechas de agricultura.
Pero no son obras específicamente dirigidas a ese sector…
Dijimos que íbamos a hacer reservorios y de pronto se escuchó: Ah, pero que también sirva para la agricultura. Pero yo no puedo invertir en ese tipo de intervenciones porque esa es una función del Ministerio de Agricultura. ¿Debemos, entonces, ejecutar un proyecto multisectorial? Seguramente. Pero no hay una inversión en ese sentido. Lo que hemos tratado de hacer es implementar algunos reservorios que tengan proyección, es decir, que se puedan convertir en reservorios multipropósito para que también ayuden al río. No todos tienen esa característica, pero sí algunos importantes y relevantes para la parte alta. Entonces, hemos tenido en cuenta la reforestación en la zona alta, en la cabecera de cuenca. En la parte media y alta tenemos reservorios y de la parte media hacia abajo estamos considerando las obras de defensa ribereña y, dentro de éstas, se encuentra la descolmatación.
Otro tema importante es la salida del río al mar, cuyo cauce natural va por Sechura, pero no es factible desarrollar una nueva obra porque afectaría la maricultura, que es una de las principales actividades económicas de esa provincia. En este caso, optamos por una salida a través del centro poblado Reventazón, pero hay que hacer un arduo trabajo de ingeniería. Entonces, si a los piuranos les dices “voy a ejecutar la salida al mar y te voy a ayudar además a hacer algunos reservorios”, ya se sienten protegidos.
Y todo este trabajo y las proyecciones ¿Dónde están o estarán?
En resumen, tienen que estar en un plan maestro que se está trabajando con el Reino Unido. A pesar de que hay un problema legal con el especialista que estaba haciendo el estudio, podemos decir que Piura está ad portas de recibir un plan maestro muy bien desarrollado con ingeniería, con recomendaciones y diseños que van a ser referentes no solo para Latinoamérica sino en el mundo, respecto a cómo estamos preparándonos para el cambio climático. Hay algo que no anoté en esta explicación y es que los reservorios, por ejemplo, podríamos no hacerlos y sentir que estamos protegidos. ¿Por qué estamos haciendo estos reservorios? porque nos estamos preparando para el cambio climático, porque con cada lustro las cosas pueden empeorar desde el punto de vista del medio ambiente. Entonces tenemos que estar preparados.
Y en cuánto al tema de la Reconstrucción de infraestructuras ¿Cuánto han avanzado?
En mis primeras visitas, los reclamos eran porque la reconstrucción no se estaba implementando, es decir, los colegios, las pistas, las veredas, las obras de saneamiento, no existían. Estas obras empezaron porque quien pone en agenda este tema, de alguna manera, es la propia Reconstrucción. El Fenómeno del Niño afectó a la ciudad, sobre todo a la parte rural de Piura. Por ejemplo, el distrito de Sondorillo, donde estudiaban precariamente, hoy tiene siete colegios totalmente culminados, tienen caminos vecinales que lo unen con otros pueblos, tienen obras de saneamiento. Entonces decían “a mí no me interesa la reconstrucción”. Me decían “si no me das prevención no has hecho nada por Piura”.
Pero, cuando llegamos, dividimos el trabajo. Las obras grandes las debía hacer la Reconstrucción, incluyendo todas las obras de prevención. Las obras pequeñas, que son las de los colegios, los caminos vecinales, obras de saneamiento, pistas y veredas, las hace el gobierno local con asesoramiento de la Autoridad. Habida cuenta de que hemos dejado encaminadas muchísimas obras y culminadas un gran porcentaje de ellas para Piura. Tenemos, aproximadamente 1,700 obras totalmente encaminadas en las distintas provincias.
Hay otros fenómenos que también requieren atención como el caso de las sequías…
Acá se tiene que atacar dos cosas. No solamente hay que ocuparse de la inundación como lo ha hecho la Reconstrucción por sus funciones, sino también concentrarse en el estiaje, es decir, en las épocas de sequía, que abundan en Piura. El Fenómeno del Niño puede venir cada 10 años y la sequía todos los años. Tienen que haber obras que sirvan para estar preparados en la época de sequía. Esto va a ser vital para el desarrollo de la región.
Un segundo gran foco tiene que estar definitivamente son las obras de saneamiento y el ordenamiento territorial, porque las grandes urbes crecen de manera desordenada. Además, dejar en segundo plano las obras de saneamiento generan otro tipo de males, una malnutrición o malas condiciones para los seres humanos en general, y, por mucho que luego pongas centros de salud, le pongas colegios, sí ya naciste con todos estos problemas poco o nada se puede hacer por el desarrollo de los peruanos.
CONCESIONES VIALES COMO PARTE DE LA RECONSTRUCCIÓN
Una de las cosas que más llamó la atención fue el nivel de destrucción de la infraestructura vial, los puentes, las carreteras. ¿Las concesionarias participaron en la reconstrucción?
Hay que considerar que desde Lima hasta Sullana todas las carreteras están concesionadas. Hay tres concesiones: la del tramo Ancón – Pativilca es de Norvial. El tramo de Pativilca hasta Salaverry en Trujillo la tiene Autopista del Norte – Aunor. Y desde Trujillo hasta Sullana, que es la Autopista del Sol, la tiene Covisol. Las concesionarias tienen, por contrato, la obligación de atender las reparaciones cuando suceden estos fenómenos y se invoca la cláusula de evento compensable o de fuerza mayor. Ellos tienen que hacer aprobar el diseño por el MTC y una vez que esto ocurre, se encuentran habilitados para tomar el financiamiento del Fondes y empiezan a construir. En conclusión, toda la vía Panamericana, que está concesionada, tiene este tratamiento y eso es lo que ha pasado.
Las grandes obras viales se hicieron a través de las concesionarias, pero no hay que olvidar que muchos caminos vecinales y departamentales han sido reconstruidos por las regiones y sobre todo por las municipalidades.
Sectores afectado en la Autopista del Sol, sector Puente Reque1. Y, el Hospital de Apoyo II-2, Sullana.
INFRAESTRUCTURA HOSPITALARIA Y COLEGIOS
En cuanto a colegios y centros de salud preocupa siempre la sostenibilidad del equipamiento y el empleo de tecnología ¿Cómo se garantiza que el diseño sea oportuno y que no tengamos una inversión que luego no se puede usar?
Sigue siendo una preocupación cuando es el Estado peruano es el que interviene. El peor ejecutor es el Ministerio de Salud. Nuestra experiencia en infraestructura hospitalaria es bastante complicada, pero estamos empezando. La dificultad no desanima. Sin embargo, no nos hemos desarrollado lo suficiente, no hemos crecido en infraestructura hospitalaria. Hemos empezado a construir estos proyectos a través de los acuerdos gobierno a gobierno G2G, que te dan una “maqueta”, un derrotero a seguir. El modelo te dice cómo vas a empezar el proceso constructivo, luego cómo es que tienes que diseñar tus expedientes de equipamiento, siempre con un enfoque de sostenibilidad.
El G2G, de acuerdo con la experiencia internacional, debe advertir sobre la marcha del proyecto en todo momento. Te sugiere qué hacer. Por ejemplo, si hay baja tensión de electricidad, no se debería utilizar determinados equipos, sino estos otros que tienen mejores características. Se invierte en tableros de control, en los sistemas, en las conexiones, en la comunicación para que duren mucho tiempo. La idea es poner los mejores implementos en tu hospital para que dure por lo menos 80 años. Piura tiene cinco establecimientos de salud que se están construyendo a través de G2G.
De otro lado, hemos logrado que el MEF y el Ministerio de Salud les otorguen financiamiento a los gobiernos regionales para el mantenimiento de los hospitales que estamos construyendo.
En el caso de los colegios, todos me dicen: “Amalia te vas a ir a la cárcel por esos centros educativos que cuestan tanto”. Claro, eso es verdad si se comparan con los colegios que a veces estandarizamos. Pero otra vez, el Reino Unido ha hecho estos colegios pensando en que duren más de 50 años. Los propios ingenieros me dicen, “yo soy de la UNI y este colegio te va a durar de 80 a 100 años, como duran los colegios en Europa”. No se están construyendo colegios aquí y allá. Se construyen grandes unidades, tremendos fortines con alta resistencia. Y, obviamente, en casi todos, hemos incluido herramientas tecnológicas. El problema allí, que está fuera de nuestro alcance, es que a veces no llega la conectividad, el Internet. Pero también hemos hecho las gestiones para que puedan llevar conexión a las infraestructuras que estamos implementando a través de G2G.
VIVIENDA
Con relación al tema de la vivienda se observa la diferencia entre la meta que se había planteado y lo que se iba logrando. ¿Qué pasó?
Ahí si nos quedamos estancados, después de lo que se logró avanzar en los primeros años. En mi gestión no se hizo absolutamente nada en vivienda, básicamente por lo siguiente, porque estaba a cargo el Ministerio de Vivienda al ciento por ciento. Su posición era, como la de todos los ministerios: “tú como Autoridad de la Reconstrucción, como unidad ejecutora, no me vas a decir lo que tengo qué hacer”. Nunca nos hicieron caso. Todo lo que se ha hecho en la reconstrucción se ha logrado con las autoridades locales. Ellos tienen su propia historia, sus propios lineamientos. La Autoridad se creó para que lidere a los ministerios, pero nadie me hacía caso. Entonces les dije “si ustedes se creen autónomos y creen que saben hacer las cosas, háganlas ustedes”. Y en vivienda no es que hayan avanzado mal, sino que detuvieron el progreso. Construyeron unas 22,000 viviendas y luego se estancaron. Y por eso ya no se le podía dar más recursos porque no ejecutaban.
¿La gente protestó por ese estancamiento?
No lo he investigado, pero, por ejemplo, en Lambayeque hay unidades de vivienda que se hicieron en el marco de la reconstrucción, pero están vacías porque la gente no se quiere mudar a las zonas en donde se desarrollaron los proyectos. Siento que el Ministerio de Vivienda se ha quedado.
Lo que he aprendido ahora es que todo se hace con educación. No es que tú digas “yo lo voy a hacer”. Tienes que estar ahí permanentemente con la sociedad educando, interiorizando, concientizando la importancia de algunas condiciones de vida. La cosa es que estaba vacío. Y, en el caso de Piura, reclaman los que no deben de reclamar. ¿En qué sentido? Los que no están dentro de la reconstrucción dicen “yo también fui afectado”, pero la verdad es que no forman parte de la reconstrucción. Creo que el sector Vivienda la ha tenido fácil, de alguna manera, pero no le ha puesto mayor fuerza a cumplir son sus metas, por lo cual se han quedado en el tintero una gran cantidad de viviendas en la Reconstrucción. Y me parece que ya no se van a hacer.
PLANES URBANOS
Desde CAPECO siempre pedimos que el Gobierno central se encargase de implementar planes urbanos porque esa es la base para promover inversiones en las ciudades y porque los gobiernos locales no lo iban a hacer. Dentro del Plan de Reconstrucción se consideró este tema y creo que nunca se han hecho tantos por año como en este caso. ¿Esos planes consideraron la infraestructura que se estaba creando tanto de prevención como de reconstrucción? Y segundo, ¿qué garantía tenemos de que los planes se cumplan?
Te diría que en materia de planes estamos jalados, pero por responsabilidad del Ministerio de Vivienda. En efecto, este ministerio elaboró algunos planes, por ejemplo, en el caso de Piura, pero no hizo un trabajo articulado con la municipalidad. Una cosa es que tú lo hagas y otra cosa es que tú trabajes de espaldas a las municipalidades. El ministerio ha hecho el plan urbano, lo ha llevado a las autoridades municipales, pero éstas no lo han aceptado. Además, el Colegio de Arquitectos de Piura le encontró mil defectos y se preguntó: “¿quién va a implementar esto si está mal formulado?”.
De nuestra parte, hemos compartido información con el Ministerio de Vivienda sobre las obras de prevención que íbamos a realizar, para que ellos las consideren dentro del plan de desarrollo urbano, pero creo que hay muy poca cultura de trabajo conjunto. Si me preguntan ¿cuál es mi percepción? Los planes están mal hechos. Creo que el principal error ha sido que no lo han socializado lo suficiente con los stakeholders de cada ciudad. En Chiclayo han recibido el plan y lo han guardado en el cajón porque no lo entienden. Hay que socializarlo, estar detrás de las autoridades como hemos hecho nosotros, para que sean conscientes y se den cuenta de la importancia de este proyecto. Yo no veía ese ímpetu y ni ese compromiso de parte del Ministerio de Vivienda, sino más bien sentía que lo hacía porque se trataba de un encargo y como es un componente del Plan de Reconstrucción, ya cumplí. Pero si preguntas: “¿cuánto de eso se va a ejecutar?” No sé si tendrán la respuesta. Entonces, no nos ha ido bien. Es un jalón de orejas para nosotros.
Adicionalmente hemos encontrado varios retos y esto también lo hemos identificado desde la universidad. La alta rotación de funcionarios en los gobiernos locales no permite trabajar adecuadamente. Iniciábamos un plan con un alcalde y a los pocos meses estaba metido en la cárcel o fugado por corrupción y terminamos esto con otro alcalde que no entendía nada de lo aprobado por su antecesor.
Lo que nosotros hemos hecho es asociarnos con algunos grupos. Acogimos la idea del Colegio de Arquitectos de Piura de crear el Comité Consultivo, que congregue a todas las instituciones alrededor de una gran mesa técnica, lo que permitió aislar el efecto político. Esta idea la hemos replicado en Paita, Sullana y Trujillo. Nos hemos reunido con los colegios de arquitectos e ingenieros y economistas, cámaras de comercio, la academia, universidades.
Hemos tratado de empoderar a la academia y a la sociedad civil en general, a través de reuniones Zoom, por ejemplo, que es una herramienta que el país no está aprovechando. Un Zoom no cuesta mucho y sirve para ofrecer información de la población, de la zona que se viene ejecutando, qué es lo que se está planteando para que cuando venga otra autoridad, los proyectos no se queden en el papel sino que se le exija el cumplimiento de lo que ya hemos convenido como sociedad: que aquí tiene que funcionar un hospital o que por acá va a pasar tal infraestructura, porque aquí va a haber una carretera que nos conecte con este otro punto. Así, si la nueva autoridad propone algún cambio, deberá explicar el por qué postula algo distinto o por qué ya no se realiza tal obra.
COMITÉS / SOCIEDAD CIVIL
Ahí hay un desafío y es efectivamente involucrar a las entidades de la sociedad civil por lo menos como un ente contralor del cumplimiento del plan porque esas entidades sí van a estar de manera permanente, tienen una legitimidad. Se crearon Comités de la sociedad civil, un poco para tratar de paliar este conflicto que había entre la localidad y la autoridad, ¿eso terminó funcionando o no?
Sí. De lo contrario no se hubiese podido hacer las obras. Y el que mejor funcionó fue el de Piura que es la región más convulsionada. Tuve mis encuentros y desencuentros en Lambayeque, pero en aspectos puntuales. Traté de incluir al Colegio de Ingenieros y a la Cámara de Comercio de Lambayeque, pero entre ellos había conflictos. Sin embargo, me ayudaron por separado. Tenía reuniones con cada uno, siempre estábamos en conversaciones. En el caso de Trujillo, también funcionó. ¿Por qué? Porque los proyectos deben tener varios interesados. Los stakeholders están enterados de todo. Si nosotros nos vamos, el proyecto debe de continuar.
SOSTENIBILIDAD EN EL TIEMPO
Ha hablado de todo un desarrollo del sistema de drenaje pluvial ¿cuál es la estrategia de sostenibilidad?
De acuerdo a la norma vigente, el ente rector es el Ministerio de Vivienda y son los gobiernos locales los que tienen que hacerse cargo de la operación y el mantenimiento. Y, claramente, este trabajo se financia con recursos ordinarios. No hemos dejado solas a las municipalidades. Hemos tratado, dentro de los planes, de buscar alternativas, de pensar con ellos cómo se podría costear.
Por ejemplo, en el dique Laminador Cieneguillo, que está en Sullana, lo que se buscaba era que el agua que se acumule en determinado periodo pueda utilizarse para regar parques y jardines y de esta manera generar un ahorro que permita operar y mantener la infraestructura. Lo segundo es utilizar el área que se va a expropiar durante la etapa de ejecución para construir este dique. Esto generará una laguna de inundación y un bosque seco de más o menos unas 150 hectáreas. En ese contexto, se estaba trabajando con el alcalde un proyecto de turismo. Hemos concretado una concesión en Piura que ha funcionado bastante bien. Por ejemplo, en el Médano Blanco, en Sechura, donde se puede hacer motocross y actividades similares. Como éstas, hay varias oportunidades para que las municipalidades generen sus propios recursos.
Lo normal sería que la municipalidad incremente las tasas por arbitrios, pero sabemos que la morosidad es alta y, por lo tanto, no cubre el requerimiento. Y lo otro que se quedó trunco porque ya no estamos en Reconstrucción, es implementar un esquema de transferencia de recursos del Gobierno central durante unos cinco años, luego ir reduciendo esa ayuda conforme el municipio desarrolle sus propios medios de generación de ingresos.
La otra opción era dejar alguna entidad encargada de los primeros años de la operación y del mantenimiento. Tenemos infraestructura de drenaje pluvial, sistemas de alerta temprana, toda una solución integral que no se ha hecho antes en el país a esta escala. En algún momento se habló de crear una entidad del Gobierno central para cuidar el gran esfuerzo que se está haciendo hasta ahora. Más o menos por ahí va la estrategia de sostenibilidad.
Como dato adicional debo decir que, cuando hemos revisado las experiencias en otros países, vemos que la operación y el mantenimiento constituyen un problema hasta para países desarrollados como los Estados Unidos y es frecuente que en esos casos sea el Gobierno central el que termine proporcionando los recursos. Aquí tratamos de hacer un mix, inicialmente el Gobierno central y luego los propios municipios. Ya hay experiencias, desde el MEF, para incentivar a los municipios a generar sus propios ingresos y de esta manera asignarles recursos mucho mayores para el presupuesto del siguiente año. En otras palabras, un presupuesto por resultados. Es una especie de incentivo a la promoción municipal.
RELACIÓN CON LOS GOBIERNOS LOCALES
Una entidad técnica independiente que gestiones la infraestructura de drenaje pluvial parece ser lo lógico. Si el Estado va a dar aportes, que lo haga a través de esta entidad. Esa empresa podría ser muy poderosa si es que tienen un ámbito macrorregional y pueda efectuar una gestión integral. ¿Va en esa línea la propuesta?
Mi idea tiene un enemigo directo y son los gobiernos regionales, que dicen: “denme la plata a mí para manejarlo”. Siempre existirá eso, un sentido de pertenencia y está bien. Pero como les dije también en el MEF: “Déjalos que ellos lo hagan”. Tú crees que cuando dije que iba a hacer las obras en el río ¿me aplaudieron? No. Ellos decían: “yo lo hago, tengo la plata, ya estoy haciendo mi estudio”. Por eso les dije a los del MEF: “si nosotros queremos crear esta entidad, se hará lentamente, hay que ir armando todo”. Entonces si la región quiere hacerlo, que lo haga. Sin embargo, llegado el momento, se tuvo organizada la institución y se empezó a trabajar. Cuando vieron cómo funcionaba, el gobierno regional nos dejó tranquilos.
Planes de drenaje pluvial de las ciudades Sullana-Bellavista y Talara que se diseñaron en el marco del Acuerdo de Gobierno a Gobierno
No hay que estar enfrentados, hay que ver las formas de hacer la política y la mejor manera de implementarla. Definitivamente, se tiene que ir con entidades o funcionarios que cuenten con un grado reputacional fuerte para que genere confianza y pueda decir: “ok, esto va de esta manera”. Pero el hecho de que exista una entidad, no quiere decir que se prescinda de los expertos piuranos. Así como la entidad del Legado administra las obras de los juegos Panamericanos, esta organización también administraría las obras que la Reconstrucción va a ejecutar.
Hay dos cosas que quiero resaltar sobre este trabajo. Lo primero, es que el equipo de planificación ha hecho esfuerzos para que, al momento de diseñar el estudio de operación y mantenimiento de las infraestructuras, por ejemplo, de los drenajes pluviales, se gaste lo mínimo indispensable. ¿En qué sentido? Han hecho que la mayor cantidad de drenaje sea superficial y no subterráneo. Además, se ha diseñado pensando en “el día después”. A veces queremos pensar solamente en la obra, en cómo se hace, cómo queda bonito, pero no vemos el día siguiente. Lo segundo, es que una solución integral de este tipo no se ha hecho antes en el Perú ni en toda Latinoamérica. Y muy pocos países en el mundo han ejecutado algo similar.
Nos estamos atreviendo a cambiar el enfoque de la prevención y a pensar en el cambio climático porque la reforestación, esta infraestructura verde, que demanda una inversión importante, tiene varios ejes de desarrollo sostenible. No solamente estamos pensando en el medio ambiente, sino también en el entorno social de todas nuestras comunidades altoandinas que también están en el norte. Es un cosmos virtuoso que se está engranando.
Todos deseamos que los proyectos no se detengan. Ahora hay algunos baches porque el Reino Unido puede ser muy bueno técnicamente, pero no tiene por qué conocer ni manejar a nuestros stakeholders, esa experiencia es de la Reconstrucción. Entonces la administración que me ha sucedido no tiene ese conocimiento y está teniendo algunos problemas en Piura. Esperemos que las obras de gran trascendencia se hagan y que el Perú pueda ser un referente para otros países. Imaginémonos a nosotros promoviendo soluciones integrales, a nuestras empresas ejecutándolas y a nuestros profesionales aprendiendo de esa experiencia.
Con relación al tema de los stakeholders, de las autoridades y de las entidades locales. Existe la tentación de hacer las cosas por administración directa. ¿Eso lo lograron controlar?
Sí lo logramos. Tú me dices: “Amalia quiero que me des plata para 10 obras”. Me estás pidiendo para 10 obras porque yo te voy a decir que hagas cuatro. Pero cuando a mí me dijeron: “Quiero plata para las 10 obras”, les respondí te voy a dar para 10 obras, pero tráeme tus expedientes técnicos. Les empezamos a ayudar a sacar adelante sus expedientes. Ellos se dieron cuenta de que se iba a financiar las obras cuando los expedientes estén listos. Entonces, les digo “pero si es que tú no ejecutas yo te quito la plata”.
Poco a poco, los más eficientes ‘se pusieron las pilas’, presentaron sus expedientes, empezaron a hacer las obras y hubo una competencia positiva porque, lo voy a decir directamente, la corrupción está en todos lados y también tenemos autoridades corruptas. En este caso, hasta los corruptos tuvieron que correr, pues no podían estar negociando obras porque sus ciudadanos le reclamaban: “Tú no haces nada, mientras que el otro mira cuánto avanza”. Además, está el hecho de que la reconstrucción se termina. A mí me rogaban para que continúe, pero les dije que en diciembre culminaba a pesar que todos me pedían que se amplíe.
Entonces el haber tenido un plan, con una fecha de término, con una lista de proyectos, facilitó mucho la gestión. Ya no tenían tiempo para estar haciendo ni obras de administración directa ni de nada. Nosotros dijimos: “Te doy la plata, pero en la Reconstrucción no se puede ejecutar las obras por administración directa”, eso está en nuestras guías. Pero, en algunos casos, yo misma he propuesto que le saquen la vuelta a algunas restricciones porque hay algo que se cae. Y, ¿Sabes dónde se cae? En algunos estudios de ingeniería.
¿Son malos los estudios? ¿Qué problemas tienen?
Nuestras empresas que elaboran expedientes técnicos son muy básicas, por decir lo menos. Pregúntales a las empresas contratistas cómo sufren con el partner que le hará el expediente técnico. Nosotros tenemos buenos constructores, pero nuestros diseñadores no son los buenos que queremos que sean. Están muy abajo, no han desarrollado sus capacidades y entonces a veces pasa que tú tienes que hacer los expedientes in house. Por ejemplo, en este asunto del estudio del río Piura, la licitación la ganó una empresa alemana que fracasó. Trabajó con profesionales peruanos y extranjeros, y fracasó. Previamente entró un consorcio peruano-español y también fracasó. ¿Por qué crees que este estudio lo estamos haciendo in house con los ingleses? Porque la empresa en el mercado no lo pudo hacer, entonces ahí como que le sacas la vuelta a la regla y dices lo hago in house. En el caso, por ejemplo, de Lambayeque, han tenido que rescatar algunos estudios, porque como la selección de consultores se les ha caído dos o tres veces, se han resuelto contratos, entonces ya se tiene que hacer in house. Esos son los casos excepcionales. Pero en la casi totalidad de obras las autoridades locales no se han quejado que la ejecución no sea por administración directa. Todos tenemos que correr y llegar a una meta, entonces ya nadie se preocupa si es por administración directa o si es por contrata.
GRANDES Y PEQUEÑAS OBRAS
Un tema a adicional sobre este mismo punto. ¿Las autoridades tenían algún nivel previo de decisión o todo era un producto hecho, una especie de llave en mano? ¿Había alguna instancia de coordinación? Por otro lado, a veces, las empresas constructoras locales se sienten desplazadas. ¿Cómo se gestionó esta situación?
Creo en una descentralización responsable. Nosotros llegamos junto con el equipo sin ningún problema. Como dije, las obras grandes, las de prevención, las hace la Reconstrucción. Las obras más pequeñas (colegios, caminos vecinales, obras de saneamiento, pistas y veredas) las hace el Gobierno local. Cuando empezamos a darle el presupuesto, yo les di prioridad. Mi primer esfuerzo fue por la reconstrucción de esas obras pequeñas porque veía cómo vivían, entonces generamos ese trabajo. Cuando iniciamos las obras grandes, nadie me dijo por qué yo no intervengo, o sea, creo que se sentían parte de toda esta gesta. Más bien obligábamos a los alcaldes a participar. Los invitábamos a la presentación de los avances del master plan y te decían que no podían venir, pero los conminábamos a intervenir y a firmar, para que vean y decidan qué hacer, para que formen parte de ese esfuerzo. Entonces nosotros los hemos comprometido y por eso es que las autoridades locales siempre han sido nuestros defensores.
I.E. 15079 Villa María, Sullana.
¿Entonces la relación con las autoridades locales ha sido buena?
Mi relacionamiento como líder del proyecto ha sido muy buena con casi todos los stakeholders excepto con el Gobernador Regional de Piura. Nuestra relación era súper mala y esa desavenencia era totalmente pública. Creo que formó parte de la identidad que le quería dar a la institución, porque siempre he dicho las cosas como son. Ahí me gané enemigos, pero definitivamente gané mucho más adeptos al proyecto. Yo sentía que él era como el mal ejemplo de lo que tenían que hacer las autoridades locales. Y si yo no le jalaba las orejas, las otras autoridades iban a decir entonces “yo también puedo actuar así, yo también puedo empezar a arreglar, a perder las fianzas”, porque los contratistas daban las fianzas por el adelanto y se desaparecían, y luego las autoridades pensaban equivocadamente que, finalmente, la Reconstrucción lo iba a ayudar y no era así. Entonces ahí la decisión fue totalmente tajante: él era la figura que nosotros no queríamos.
Pero en general, mi relacionamiento con los stakeholders fue buena, ellos sentían que tomaban la decisión conjuntamente con nosotros, es decir que las iniciativas no se tomaban desde Lima, sino que tanto el sector privado como el sector público intervenían en la toma de decisiones. Me invitaban a distintos foros del sector privado, yo estaba con ellos. Y en el sector público, como la Reconstrucción era su casa, las autoridades venían cuando querían y yo les contaba toda la historia de todo lo que estábamos haciendo. Entonces ellos sentían que formaban parte de este proyecto.
GESTIÓN DE PROYECTOS
Esta revolución de las PMO, que trajo el éxito de las obras en los Juegos Panamericanos, también introdujo de manera más consistente la metodología BIM, cuyo beneficio principal es la gestión integral de las infraestructuras, porque el 80% de su valor no está en el diseño y la ejecución sino en la operación y el mantenimiento. ¿Esto ha quedado plasmado en documentos? ¿hay una evidencia para que las autoridades le den continuidad y no quede en el olvido o encarpetado?
En el caso de los hospitales, mi frustración ha sido que no pude entregar un centro de salud culminado porque solo faltaba que el presidente Castillo lo inaugure y no sabía que me iba a sacar antes. Pero, ¿qué pasó? Inauguraron la obra y luego resultó desmantelado el centro de salud. Les fue fácil hacerlo porque este centro se ubica en la parte alta de Piura, en la zona rural de Limón de Porcuya, que antes solo tenía una posta médica. La justificación fue que, como ningún médico quiere ir, ellos prefirieron desmantelarlo para llevar el equipamiento a otro centro de salud. Esto ha generado preocupación en algunos representantes de la zona que reclamaron para que, por ejemplo, su equipo dental, que es muy sofisticado, no se lo quiten, pero se llevaron hasta los tachos. ¿Qué hubiese hecho yo en el lugar de mi sucesor? Si me entero de un desmantelamiento de tal magnitud, hago un escándalo con la prensa, hasta que lo regresen a su sitio y en ese momento saco a relucir el documento, el manual de operación y mantenimiento.
En este caso, tenemos dos enfermos: El que va a administrar propiamente el hospital y sobre todo el Minsa, que no tiene políticas claras. Por eso es que los gobiernos regionales tampoco saben qué hacer. La culpa no es del Gobierno regional solamente, sino del Gobierno central que no ha evolucionado en las políticas de salud, en cómo se deben implementar estos hospitales y cómo debe ser su mantenimiento y operación. Nosotros les estamos dejando un manual para que sepan qué hacer. Mi sucesor tiene que entender que el proyecto no termina con la obra. Él tiene que hacer que la usen.
Cuando se estaban instalando los hospitales temporales para atender a los infectados por el COVID, me tuve que pelear con medio mundo para que funcionen. Yo he entregado hospitales de contingencia y todos se están usando. Además, se informa a la población sobre cuántos equipos se están dando y se les dice cuánto van a durar. La gente se queda con esa foto. Hago mención de la inversión en tecnología, de los equipos que hay, de cómo nos hemos asegurado que los establecimientos tengan agua durante las 24 horas del día.
El gestor de proyectos tiene que decir, yo dejo algo para la comunidad y me esfuerzo para que funcione como debe ser. Allí recién volteó para otro lado, sino tengo que seguir. Lo que tenemos que hacer es pasar de un modelo de construcción de infraestructura a un modelo de gestión de infraestructura. Eso implica cambiar desde el punto de partida, hasta la forma de presupuestar.
Fuente: Informe Económico de la Construcción – IEC N° 56-57 / CAPECO