Un grupo de científicos de la Universidad RMIT, en la ciudad de Melbourne, Australia, ha desarrollado un polvo magnético capaz de eliminar los microplásticos del agua en menos de una hora, lo que, según afirman, permitiría erradicar estos residuos con mayor rapidez y a menor costo.
Fuentes académicas australianas han informado de que los investigadores aseguran que su polvo, fabricado con nanomateriales y que contiene hierro, logra atraer los microplásticos, sin crear otras sustancias contaminantes o dejar huella de carbono.
Este material, de color marrón y procedente de materiales reciclados, se mezcla en el agua que contienen microplásticos y tras una hora permite usar imanes para separar con facilidad los microplásticos y sustancias contaminantes del elemento líquido. Otras técnicas se demoran varias horas o incluso días.
«Nuestro aditivo en polvo puede eliminar microplásticos que son 1.000 veces más pequeños que los que actualmente pueden detectar las plantas de tratamiento de aguas residuales», ha señalado Nicky Eshtiaghi, líder de esta investigación, en un comunicado.
Según la agencia EFE, la investigación, publicada en la revista científica Chemical Engineering Journal, ha sido probada con éxito en laboratorio y ahora busca colaborar con la industria para observar “su aplicación en plantas de tratamiento de aguas residuales”.
Los científicos del RMIT indican que su sustancia podría ser una alternativa rentable para reducir los millones de toneladas anuales de plástico y microplásticos que se vierten en el mar.