Con la finalidad de establecer medidas que garanticen la continuidad de los servicios de saneamiento para la población mientras dure la emergencia nacional a causa del COVID-19, el Gobierno autorizó a las empresas prestadoras de servicios de saneamiento (EPS) suspender por cinco meses el pago de las obligaciones establecidas por la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass) para que éstas puedan continuar con el financiamiento del mantenimiento y operación de sus servicios.
A través del Decreto de Urgencia N° 036-2020 se detalló que los pagos prorrogados son los referidos al Fondo de Inversiones y las reservas por mecanismos de retribución por servicios ecosistémicos, gestión del riesgo de desastres y adaptación al cambio climático. En este caso, será la Sunass la que realizará la fiscalización para que el uso del fondo y reservas sean destinados para los fines correspondientes, de acuerdo a la documentación que remitan mensualmente las EPS.
Para complementar esta medida, las empresas podrán disponer de los recursos provenientes de saldos de balance de las fuentes de financiamiento de donaciones y transferencias y de recursos directamente recaudados y las transferencias financieras que realice el OTASS con cargo al presupuesto institucional, hasta por un monto que no podrá exceder los S/ 75 millones 480 mil; para lo cual este organismo efectuará el control y seguimiento correspondiente.
El referido D.U. también invoca a los gobiernos regionales y locales a realizar las gestiones correspondientes para garantizar, a través de las EPS, el abastecimiento del servicio de agua potable a sus pobladores. Igualmente, los insta a promover el uso racional del recurso en la preparación de alimentos, el aseo personal, entre otras necesidades humanas básicas, con el fin de prevenir la propagación del brote del COVID-19.
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