El Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) invertirá aproximadamente US$ 43,000 millones en la ejecución de siete grandes proyectos ferroviarios destinados a modernizar y optimizar el transporte de pasajeros y mercancías a nivel nacional. Así lo anunció el ministro Raúl Pérez Reyes, quien destacó que estas iniciativas buscan mejorar la conectividad del país, reducir costos logísticos y fortalecer la infraestructura ferroviaria con la incorporación de más de 2,800 km de nuevas vías.
Dentro de esta cartera de proyectos, destaca el Ferrocarril Lima-Ica, que contará con una inversión de US$ 6,500 millones y será ejecutado bajo la modalidad de Gobierno a Gobierno. Este ferrocarril de 280 km conectará Villa El Salvador (Lima) con la provincia de Ica, reduciendo el tiempo de viaje de 4 a 2.5 horas, con trenes de pasajeros que alcanzarán 200 km/h y trenes de carga con velocidades de 100 km/h. Actualmente, once países han manifestado su interés en integrar la Oficina de Gestión de Proyectos (PMO), que brindará asistencia técnica para su desarrollo.
Otra obra de gran envergadura es el Ferrocarril San Juan de Marcona-Andahuaylas, que demandará una inversión de US$ 8,200 millones. Con una extensión de 560 km, este proyecto beneficiará a más de 4 millones de personas al conectar las regiones de Ica, Arequipa, Ayacucho y Apurímac, facilitando el transporte de minerales y dinamizando la economía del sur del país.
El Ferrocarril Lima-Barranca, actualmente en fase de elaboración de perfil, tendrá una inversión estimada de US$ 4,400 millones y una longitud de 246 km. Su recorrido abarcará puntos estratégicos del corredor costero, como Ancón, Chancay, Huaral, Huacho y Supe, beneficiando a 4.5 millones de personas y fortaleciendo la integración de la zona norte de Lima con el resto del país.
También se ejecutarán otros cuatro proyectos: el Ferrocarril Hidroeléctrica-Quillabamba (US$ 561 millones), el Ferrocarril Barranca-Trujillo (US$ 5,000 millones), el Ferrocarril Cajamarca-Lambayeque (US$ 4,900 millones) y el Ferrocarril Chancay-Pucallpa, que con una inversión de US$ 14,300 millones será el más ambicioso de todos, consolidando la conexión entre la costa y la Amazonía.